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No puede ser. Claro, tuvimos algunas infracciones menores, pero cumplimos el castigo. ¿Verdad? ¿Verdad? Entiendo. Santa es la estrella sorpresa del programa, ¿no? Espera, espera, ¿qué dices? Papá dijo que yo era la estrella. Sigue, hermana. La diva necesita tiempo para procesar lo obvio. Nos metemos al trineo de Santa, volamos al Polo Norte y exigimos lo que nos merecemos. Entramos y salimos. Regresamos para Navidad. Quienes estén a favor, digan «yo». Yo. Yo. Yo. No. Es unánime. Estoy segura de que eso no es lo que significa «unánime». Ebob, necesito que pases a recoger todos los trompos. ¿Qué pasa aquí? ¿Es como una feria? El pobre Santa y la señora Claus tienen un resfriado terrible. Mejor los veo de inmediato. Eso no es posible. Está en cuarentena. Es muy contagioso. Sobre todo para los elfos. Por eso vinimos a echar una mano. Sí. Sí. Y él quiere asegurarse de que los elfos cumplirán con sus pedidos para Navidad. ¿Pedidos? ¿Quieres decir deseos? Pedidos, deseos, como sea. Escuchen, Roland sustituirá a Santa mientras tanto. Y necesitaré acceso total a las listas de Santa, a las galletas y por supuesto, al reno y al trineo. Esto es bastante inusual. ¿Por qué gira todo? Como pueden ver, es una orden oficial del mismísimo Gran Hombre. «Por orden de Santa. autoridad de Navidad. Por el presente oficial.» Adelante, mira bien de cerca. Parece legítimo. De acuerdo. Escuchen todos. Este es el jefe. Jo, jo, jo, a todos. Preparen el trineo. Asistiré a eventos muy importantes esta noche. Así que. Veo los calzones de Santa. Cubre tus ojos. Rápido. Está bien. ESTA NOCHE TEATRO MANHATTAN Tía Lou, ¿puedo preguntarte algo? Puedes hablar conmigo de lo que sea. Para eso son las tías. Finjamos que tengo un amigo que desesperadamente quiere dar un paseo en el trineo de Santa. ¿Y te preocupa que este amigo te meta en la lista negra? Tal vez. Bueno, chicas. Platiquen después. Es hora de ir. Bien. Volumen. Sí, entonces. Mira a nuestros pequeñines. No los estamos presionando, ¿cierto? No, ellos saben que pueden decirnos lo que sea. Somos buenos padres. Estén pendientes, cachorros.

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