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Entonces llegó mi hermana Miriam. Había estado haciendo cola en la panadería. Empezamos a cavar inmediatamente. Los vecinos nos ayudaron. Al alba habíamos encontrado a mi padre, mi madre, mi hermanito. .mi tío, su mujer y sus hijos. Estaban comiendo juntos. Al día siguiente, después de enterrarlos. .le pedí prestados . dólares a mi jefe. Mi primo nos llevó en la furgoneta hasta la frontera turca. Cruzamos la frontera a pie. Tuvimos suerte, no había policías fronterizos. Al cabo de dos semanas le dimos . dólares a un traficante. .y nos llevó a Grecia en barco. Desde allí seguimos caminando, cruzamos Serbia y Macedonia. .hasta llegar a Hungría. Pero hubo un altercado y me separaron de Miriam. Entonces cerraron la frontera. Miriam se quedó al otro lado. Intenté regresar esquivando a la policía. .pero dos de ellos me agarraron y me tiraron al suelo. Me esposaron y llevaron a la cárcel. ¿Sufrió usted violencia? Continuamente. Intentaron llevarse a mi hermana tres veces. Por suerte, nos ayudaron. ¿Por qué le dio tanto dinero el dueño del taller mecánico? Es el padre de mi prometida. ¿Dónde está su prometida? Murió al empezar la guerra. Siga. Lo encarcelaron. Primero me dieron una paliza y a los cuatro días me soltaron. Busqué a mi hermana sin éxito. Pregunté en todos los campos, pero nadie supo decirme nada. Durante dos meses recorrí Hungría. .Austria, Eslovenia y Alemania. Incluso regresé a Serbia. .pensé que quizá ella me buscaría allí. ¿Cómo cruzaba las fronteras? Es fácil. Nadie quiere vernos. Somos un problema. ¿No pidió asilo en ninguno de esos países? No. Así podía moverme con libertad y buscar a mi hermana. Sé que está viva. Lo noto aquí. Tenga, es una foto de mi hermana. Anote el nombre y la fecha de nacimiento de su hermana. Y descríbala en detalle. Iniciaremos una búsqueda. ¿Quiere hacer una pausa? ¿Por qué? Te abrazaré con fuerza Haremos el amor toda la noche Nos despediremos al alba No te dejaré escapar Danos un cigarro. Lo siento, no entiendo. Vamos, imbécil. ¿Quieres que te parta la cara? ¡Espera a que te atrapemos, camellero!