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Hola, feliz Navidad. ¿Cómo te llamas? ¿Por qué me escribiste esto, Santa? “Querido Roberto, cómo no tiendes nunca la cama, “no recibirás un regalo este año. “Te invitamos a corregir este defecto “y postularte para el regalo la próxima Navidad”. Yo no lo escribí. “Mejores deseos, Santa”. Ahí está. Yo lo recibí. Y yo. Y yo. Yo también lo recibí. ¡Hola! ¡Dios mío! Me hace muy feliz que estés aquí. ¿Le dijiste a Alex que pasaría la Navidad con él y mi exesposa? Sí. Su deseo de Navidad es ir a ese restaurante chino al que siempre iban en Navidad, Sun Ming, y comer los rollos fritos rojos y verdes. Te dije que no me llevo bien con Jessie. Tiene una nueva vida con su esposo y Alex, y yo no puedo ir allí. Sí. Pero si usas la Navidad para abrirte y hablar de eso. ¿Yo? ¿Abrirme? Kringle, tú eres quien omite cosas. Como que hablas lengua de señas o que tienes monedas de chocolate. Bien. Es justo. Sí. Mi papá era Santa Claus y era genial. Cada Nochebuena, entraba por la chimenea. Podía entrar por la puerta, pero quería darnos todo el paquete. Con Nick espiábamos desde el cuarto, y yo decía que vi a mamá besando a Santa. Y papá se sentaba con nosotros y nos contaba sobre su noche, y ese era mi regalo favorito. Y luego, la duende Polly, ahora tía Polly, nos llevaba a la cama. Hace seis meses, papá murió, Nick se convirtió en Santa y se sentía abrumado, así que le dije que debería tomarse un tiempo, irse por un tiempo, y terminó aquí, y ahora quiere quedarse y hacer yoga, y en el Polo Norte están enojados conmigo. Así que tomé el trineo y los renos para venir a buscarlo. Bien, gracias por ser tan buena con Alex. Buena suerte, Kringle. Feliz Navidad. Mira, ¡hay otro Santa! ¿Qué haces? Es mi trabajo. Vete de aquí. ¿Puedo decir una cosita? Tengo licencia. Tengo un diploma de la escuela de Santa de Phoenix. Vuelve a sentarte. Perteneces aquí. Esa silla es mía. Disculpa. Tú siéntate. Ni siquiera eres el verdadero Santa. Muestra algo de respeto. Él es el verdadero Santa. Discutámoslo por aquí. ¡Oye! Tú. Vendrás conmigo. ¡Lo siento! ¿Puedes dejarla? No es necesario. ¡Noelle!
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