Radio Castelldefels 98.0 FM Sitio de escucha de radio en línea. Transmisión de radio móvil e ininterrumpida de 24 horas.

A aquel que me protege y está a mi lado aun ahora. Hija, ni imaginas los terrores que te haré sufrir. Pues adelante. Ni sospechas de los horrores que puedo desatar sobre ti. Desátalos. Ningún paso que des será seguro. Ningún sueño será apacible. Planearé batallas. Revelaré profecías. ¿Quién eres tú para desafiarme? Yo no soy nada. No soy más que una brizna de césped. Pero yo soy. ¿Creen que conocen el mal? Aquí está. ¿Y bien? ¿Por qué el diablo estaría interesado en usted? Yo. ¿Puedo dormir? Estoy muy cansada. Sí, por supuesto. Tiene que dormir. Ojalá pudiera apagar la luz. ¿Qué? No, no se preocupe. Buenas noches. Vanessa, míreme. Ya puede salir. Vuelva a mí suavemente. Escuche el sonido del gramófono. La aguja cortando la cera. No, no. No he terminado aquí. ¿Srta. Ives? ¿Puede mirarme? Lo lamento mucho. No fingí ser normal lo suficientemente bien. Lo intenté. Hablé humildemente. Incliné la cabeza. Fui un perro sumiso. Fui la mujer que él quería que fuera. Casi lo logro. Pero luego me pidió que hablara de mi fe. Le dije la verdad. Que la gloria inmortal de Dios vive en mí. Como en todos nosotros. ¿Qué otra cosa sino demencia sería eso para el Dr. Banning? ¿Quiere comer? ¿Para qué me molesto? Necesitará fuerzas mañana. ¿Será mañana? Sí. ¿Quedará algo de mí? ¿Llevará mucho tiempo? Unas horas. ¿Sentiré dolor? No. No, estará sedada. ¿Su esposa le cocina? Sí. Es buena cocinera. Yo sería una esposa terrible. Eso no es cierto. Y usted es pésimo para mentir. Extrañaré su cabello. Yo también. No, quiero decir que mañana me voy. ¿Qué? Dejaré el trabajo. ¿Tiene otro? No. No importa mucho. Le contaré qué pasó. Estaba en casa anoche. .ayudando a mi hijo con un barquito de madera. Es algo nuestro. Y me preguntó por el barco. Le dije que era de los que se usan para explorar los mares. Y me preguntó: «¿Dónde exploran, padre?». Y le dije que en todas partes. En Oriente, en Perú. E incluso en el congelado norte. Y me dijo: «¿Qué es eso, padre?». Y le dije que son todos los lugares cubiertos de nieve. El norte de Escocia, y aun más allá. Y me preguntó si vivía gente allí. Y le respondí.