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Así que, si estáis en la última fila del último piso de arriba, y creéis que no os veo, estáis muy equivocados. Veo absolutamente a todo el mundo que está aquí. Os veo bailar. Os veo levantar las manos. Y por si fuera poco, os oigo. Lo oigo todo. Es como si cada uno de vosotros os supierais de memoria todas las canciones, y no solo las cantáis, sino que. .las gritáis. Si intentase adivinar cuál es la única cosa que todos en este estadio tenemos en común, me atrevería a decir que es que todos queremos entrar algo de verdad. Como. .la amistad verdadera, el amor verdadero, alguien quien ectemos. Alguien que sea honesto nosotros. Creo que en realidad eso es lo que todos le pedimos a la vida. Y creo que lo que más nos asusta en la vida es aquello que supone una amenaza, la posibilidad de que entremos algo real. Por ejemplo, tener mala reción, para nosotros, podría interponerse a la hora de entrar una amistad real, un amor real, una aceptación real, gente la que encajar. Porque piensas: «¿Y si han oído algo que no es verdad? ¿Y si tienen una imagen precebida a partir de rumores? Si es así, no querrán ocerme y nunca sabrán cuál es la realidad». Por eso creo que a algunos de nosotros, más bien a la mayoría, o incluso a todos, nos asusta tener mala reción. Porque tenemos miedo de que algo falso, como un cotilleo o un rumor, o un nombre cualquiera, se interponga en la búsqueda de algo real. Y cuando todo se reduce a ese miedo y a esa ansiedad, es un tema bastante «delicado». ¿No creéis, Dallas? Un, dos, tres, ¡vamos a pasarlo bien! Bueno, Dallas. Se me acaba de ocurrir tantear bien todo el estadio para ver si lo estáis pasando todos bien. ¿Os estáis divirtiendo? Venga, ¿bailáis migo? ¿Qué me decís? Venga, Dallas, otra ovación gigante ¡para Charli XCX y Camila Cabello! ¡Un aplauso enorme para Charli XCX y Camila Cabello! A ver, chicos. Me preguntaba si os parecería bien que. Muchas gracias. Debo ser sincera vosotros. Tengo un catarrillo de nada, muy pequeño. Espero que no os importe. Voy a tener que sonarme la nariz. Me daré la vuelta para hacerlo. Aunque aquí lo realmente importante es cómo Giuseppe me ha dado el pañuelo.