La Nueva Azul Sitio de escucha de radio en línea. Transmisión de radio móvil e ininterrumpida de 24 horas.

Es ardiente, pero no. No me gusta lo picante, pero esto. ¿Sabes qué más está ardiente? Tu aliento. ¿Por qué me respiras así, en la cara? Estás masticándome en la oreja. Sigues mascando. Maldita sea, ya déjalo. Ya deja eso. ¿De verdad? ¡Dios mío! ¿Qué te pasa? ¿Qué? ¿Por qué no viniste de negro? Mi ropa oscura estaba lavándose. ¿Y viniste de amarillo? Es fresco. Es limpio. Quítame el brazo de la cara. Déjame en paz. ¡Concéntrate! ¡Vámonos! ¡Vámonos! Oye, Teddy, ¿cuál es el plan? Vi al mozo limpiando la oficina de Stewart a las . Ya veo. Es tu entregador. No, Bobby. No es mi entregador, es el mozo de limpieza. Videollamada entrante de. Lisa King Rayos. ¿Qué? Debo atender. No. Eso no va a. Rayos. Hola, mi amor. Hola, cariño. Te extraño. ¿Sigues en el trabajo? Sí. En este momento, estoy en el descanso. ¿Me muestras tu oficina? Si mi amor quiere ver la oficina, la verá. Siempre quieres ver algo Ay, Teddy. Hola. Teddy, tenemos un problema. Un verdadero problema. Lava caliente. ¡Oh, Dios! La cabeza de la tortuga está saliendo. Es uno grandote. Espera, ¿qué está pasando? Cosas grandes. Es uno de mis gerentes de cuenta. Son todos unos personajes. Nos reímos sin parar. ¡Lava caliente! Sin parar. Ya sabes cómo es la gente en la oficina. ¿Quién es.? Oye, ¿qué te pasa? Me cortaste, amigo. ¿Quién es? Es. Es uno de mis clientes. Justo ahora. Sí, mirábamos sus inversiones. Parece que está en prisión. ¡Dios mío! Eres muy hermosa. Cariño. Eso parece, porque sí está en prisión. Por tráfico de influencias. Fue acusado injustamente. Te pareces a JLo y Beyoncé, mamita. ¿Me mostrarías tu mercadería? ¡Basta, Bobby! Date la vuelta y muéstrame ese culito. O una tetita, algo. ¿Perdón? Ahora soy muy poderoso aquí. Podría hacerte cosas. Legendarias. Basta, Bobby. Me conformo con un muslo, pero en realidad, quiero ver conchita. ¿Cómo dice? Oye. ¡Dios mío! No sé qué me pusiste. ¡Acabo de notarlo! ¡pero parece el diablo! Acabo de notar lo que dijo, mi amor. Dijo “casita”. Amigo, hace tanto que no veo una conchita. ¡A Bobby le gustan las casitas! ¿Sabes qué? Te llamo después. Te amo. Y. Te mostraré la oficina cuando termine.