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¿O es lo mismo? Bueno, ¡basta! Esto es ridículo. Los raperos negros se hacen llamar “negros” siempre, ¿y yo no puedo tener un lindo muñeco negro? Se está notando lo blanco de tu amiga. Pero tiene razón, ¿no? No. Ese muñeco es por lo que los hombres y mujeres negros se menosprecian. Ellos también aceptaron su marca. Marshall McLuhan tenía razón. “El medio es el mensaje” y el mensaje se impuso. Esta pobre criatura deformada tiene vida gracias a una mujer inglesa blanca y sólo aprendió de la fuente del racismo. Es una aberración que se rehúsa a morir ya que nuevas generaciones resucitan su alma torturada. Créanme. Este muñeco no les dará consuelo. Está lleno del dolor y el tormento que años de odio pueden producir. Puede darte lo que quieres, pero no cómo lo quieres. Tengan un buen día, señoritas. Vámonos. ¿Aquí está el muñeco? No puedo creer que me convencieras. Vamos. Odiaste a ese anciano incluso más que yo. ¿Puedes hacer que entremos? Debe ser una broma. Las cerraduras de lugares viejos como este son de la Edad de Piedra. Ve a hacer lo tuyo. Listo. Fue fácil. Cielos, tu hermano es un criminal. Sí, lo sé. No te quejabas anoche cuando “caí” dentro de tu “ya sabes qué”. Cállate, qué obsceno. Voy por tu trasero. Ya basta. ¿Qué son estas cosas? Es un Museo de historia rara. Grandioso. ¿Qué? Es un poste de azotes. Si yo fuera tu amo, te ataría ahí y te castigaría por no obedecer los pervertidos deseos de este hombre blanco. Estoy asustada, grandote. Hola, muñequita. ¿No te aburre estar encerrado? Yo te sacaré. ¿Cómo te sacaré? Creo que tendré que llevarme todo esto al Hotel y sacarte de este pueblo retrógrado. Más vale que te voltees, chica. Calentaré ese trasero y luego lo atacaré. ¡Eres tan sucio, papi! ¡Qué asco! No quiero oír sus conversaciones sucias. Tú te acostaste con mi hermano primero. Sí, y soportamos que te dijera su “estúpida Blancanieves”. Qué asco. Mi hermano era tu desagradable muñeco negro. ¡Como sea! Sí, parece que esta es mi venganza. ¡Quítenmelo de encima! ¿Estás bien? ¿Estás bien? ¡Chicos! Ya no necesitarás la caja.
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