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Pero tú, tú puedes ponerte en contacto conmigo siempre que quieras. Tomemos otra copa por eso. Mire, señor, si no le importa. Vale, vale, de acuerdo. Anda, vete. Gracias por la copa. Vale, dale recuerdos. Lo haré. Un policía con una cita. Es bueno saber que algunos sois humanos. Algunos incluso estamos casados. Cuídate, Lucky. Podría también cuidarte a ti si me dejaras. ¿Está ahí Laurie Lovett? ¿Todo bien, Inspector? Eso depende de tu conciencia. ¿Laurie? Mañana, mejor me recoges a las ocho y media. Así evitaremos todo el tráfico. Estarás antes de los caballos. Vale, vale. A las ocho y media. Doug Savage quiere salir antes de amanecer. Mejor llenáis los taxis esta noche. Sí, vale. Me has hecho fallar el tiro. ¿Por qué no aprendes a ser un buen perdedor? Hablando mientras uno se concentra. Tranquilo. Observa. Buen tiro. Suave como terciopelo. Diez, diez. Podrías cepillar la mesa de vez en cuando, Bert. ¿Qué quieres por diez peniques, piel de leopardo? Supongo que no habrá jabón. Sí, hay jabón. Apuesto a que es de los de propaganda. ¿Sabes lo que vi hoy? Una mini aspiradora de mano. Muy buena para limpiar mi taxi. Si me compro una, Bert, .podrías usarla para las mesas, a diez peniques la hora. Así jugaría en una mesa limpia y además gratis. ¿Qué te parece? ¿Hacemos un trato? No hagas ruido. Sigue lavándote. ¿Don? Diles que se vayan. Que ya les alcanzarás. Vale, Don. No hace falta que me dispares. Espero que no. ¡Díselo! Vale. Eh, podéis iros. Me reuniré con vosotros en Lacy Arms. Aún tengo cosas que hacer. Eso es toda esa cerveza que te metes por el esófago. Nos vemos. No me mires. Dile a Bert que baje a cerrar. Vale, Don. Bert, ve abajo y cierra la puerta. No merece la pena hasta que te vayas. ¡Ciérrala! Haz lo que te digo ¡Muy bien, Laurie, muy bien! Baja esa persiana. Me alegro de verte, Don. Ya. necesito pasta, Laurie. ¿Qué tal cinco pavos? Necesito doscientos o trescientos. ¿Doscientos o trescientos? Hola, Bert. Don. No te he visto llegar. Ni tú ni nadie. Y lo que es más, yo nunca he estado aquí. ¿Comprendes, Bert? Sí, claro, Don. Ahora te vas a sentar muy tranquilito en tu oficina.

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