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Las brujas caminan entre ellos. Y lo saben. El Bien debe denunciar al Mal Bajo nuestra guía, el pueblo se purgará. Salem será purificada. Sra. Putnam, ¿sabe algo? En una hora, todos lo sabrán. Reverendo Hale, ¿cual es su veredicto? No lo sé. Lo que me preocupa es que esta niña no presenta señales. Los ojos deberían ser blancos. ¡No! No veré a nadie. Es usted. Disculpe, señora. Pero te dije. ¿Qué me dijiste? Repítelo ante el Reverendo Hale. Es mi esposa. Perdí seis hijos en ocho años. ¿Seis hijos? Seis. Todos vivos y sanos cuando los di a luz. La gente quiso culparme, Reverendo. Dijeron que era el castigo de Dios por mis pecados. Intentaron que sintiera asco de mi misma. Pero todo está claro ahora. Mi noche oscura ha acabado. Mi hija está embrujada, como mis otros seis hijos. Si falla en su deber, ella también morirá. No puedo concluir tan rápido. ¡Dese prisa! ¡Las madres de Salem lo exigen! ¡El diablo está aquí y muchos niños morirán! ¿Quiere el nombre de la bruja? Le prohíbo nombrar a alguien. No habrá acusación sin pruebas. Es la señora. Quieta. Sus hijos murieron de enfermedad. Los Putnam nunca enferman. No, Reverendo, Nunca. Tengan paciencia. Todo está en los libros. Si Satanás está entre nosotros, lo aplastaré. Si todos piensan demasiado en el Diablo, acabarán olvidando a Dios. Vamos, cariño. Tranquila. Tranquila. Mamá. ¿Qué le hizo? Rebeca, no quiero que nadie me haga daño. No temas. ¿Esta niña está en poder del Diablo? Si es así, ¿cómo he podido calmarla? ¿Soy una bruja? He sido veces madre y veces abuela. Puedo reconocer a un niño enfermo. ¿Enfermo? ¿Es enfermedad cuando una niña quiero volar? ¿Quiso volar? La contuve veces. ¡La prueba de la brujería! ¡No, señora! Les advierto que no hare nada. A menos que admita que no he encontrado rastro del Infierno. Lo aceptamos, señor. Reconocemos nuestra incompetencia. Estamos en sus manos. ¡Ha llegado el Vicegobernador! Le informé yo, es lo habitual. Nunca creí que vendría. ¿Tan grave es? No hay tiempo que perder. ¿Sus conclusiones, Hale? Señoría, no tengo. Concluya ahora y convoque a los jueces. Señor, honestamente, no estoy seguro.