Devocionales de Poder, Emisoras Radio en vivo Colombianas radios online…
Orkan Erdem no opinaría lo mismo. No fuimos nosotros. Al contrario. Hacía tratos con él, lo tenía comprado. Iba a provocar la derrota de Alemania, estaba bien planeado. Casi me da un ataque cuando no apareció. Por suerte, salió bien al final. ¿Y Späti? Fue culpa tuya. Tu apuesta le costó la vida. Späti sabía que teníamos a Orkan. Creímos que nos había traicionado. El pobre lo negó hasta el final. Y decía la verdad. Sigo sin entender para qué me necesitas. Vamos, usa el cerebro. Piensa. Nos conviene a los dos. ¿Tu hermano? No te aceptaría como jefe del clan y quieres que lo encerremos. Interesante. Ya estamos en ello. Pero no vais bien. Solo encontráis almacenes vacíos. Yo miraría en el hueco de un ascensor. ¿De cuál? Del nuestro. ¿En tu casa? ¿En tu barrio? Habitación segura con dinero y coca. Un tesoro para la policía. No hay droga ni billete que no pase por las manos de Hakim. Y no usa guantes, ya me entiendes. Nadie se atreve a ir por allí. Se siente seguro en casa. Y hoy más que nunca. Por la boda. La firma oficial será a las cinco. Id antes. Será imposible. Con lo que ha pasado hoy. Pues encuentra una manera. Si no ocurre antes de la boda, enviaré tu recibo a la prensa. ¿Cómo se llamaba? ¿Kamila? Su negocio y su prometida. Eso a ti no te importa. De acuerdo, escucha. Podéis registrar mi casa, allí no hay nada, ¿vale? Hacéis vuestro paripé, la ponéis patas arriba y miráis lo que sea. ¿Sí? Que sea convincente. Ya. Luego me soltáis y os daré una forma de relacionarlo con la muerte de la niña y también la de Canberk. ¿Y cuando Hakim sea arrestado tendré el recibo? No, no, amigo mío. Esto será el comienzo de nuestra relación. Mi negocio se basa en la compra de personas concretas a las que hay que presionar o sobornar. Pero no todos colaboran. Y ahí es donde entras tú. Necesito a alguien que descubra los trapos sucios de esas personas, sus intimidades, solo así podré presionarlas igual que ahora te presiono a ti, ¿entiendes? Valoras tu trabajo y sobre todo a tus dos familias. Sé que no harás nada que pueda perjudicarlas, como dejar que te metan en la cárcel. ¿Me equivoco?
448 90 03, 317 654 63 21
Email: contacto@devocionalesdepoder.org
Comentarios (0)