Radio Calor, Radios en vivo emisoras de radio en linea por internet Perú…
¿Nunca has visto a nadie conseguir jiggy antes? [Estudiantes que se ríen] HARVEY: Ahora, esto fue muy divertido, incluso aunque nosotros no tuvimos la oportunidad de ver el espectá. SABRINA: Bueno, sí, pero casi escuché una canción. Esto ha sido el mejor cumpleaños. Je. HARVEY: Hey, mira, ahí está. [Aficionados animando Y aplaudiendo] Wow, Sabrina, te miraba como si te conociera. Sí. En sus sueños. Disparan caballos, ¿no? [Cantando] Cariño, estoy tan en ti Tienes que algo ¿Qué puedo hacer yo Baby, me haces girar alrededor de Oh, la tierra se está moviendo Pero no puedo sentir el suelo Cada vez que me miras Mi corazón está saltando Es fácil ver Me vuelves loca Simplemente no puedo dormir Estoy tan emocionada, estoy en lo profundo Oh, loco, pero se siente bien Baby, pensando en ti Me mantiene despierto toda la noche que me alegra que cambiaras de opinión sobre ellos. Pero debería haberles permitido quedarse en Alexandría. Pues te está costando mucho no permitírselos. Teniendo en cuenta. ¿Qué cosa? Que te caen bien. ¿En serio? ¿Eso pienso? No te oigo negarlo. No significa que confíe en ellos. Ella aún tiene mis cuchillos. Nos llevan a un lugar seguro. Vamos a ganar. Pero ya estamos a salvo. ¿Qué digo siempre sobre tener opciones? No estar indefensos aquí afuera porque les diste motivos para desconfiar de nosotros. Yo escojo esa opción. Salvo que, espera. Chicos. Calma. Tengan un poquito más de paciencia. Cuando encontremos nuestra equipo, tomaremos nuestras cosas y nos iremos. No, bien, no. Quiero mis cuchillos, carajo. Lamento lo de Magna. A veces es un poco impetuosa. Esa es una forma de decirlo. Está nerviosa desde que perdimos a Bernie. ¿Él llevaba mucho con ustedes? Lo suficiente. Le encantaba molestar a Magna. Él. Tenía una camisa espantosa. Era como una explosión de mal gusto en estampado búlgaro. Por Dios, era horrenda, pero. Magna la detestaba. Decía que le daba migraña con solo mirarla. Así que Bernie se la puso todos los días. Durante una semana. Francamente, creo que a Magna empezó a gustarle la camisa.
Comentarios (0)